La primera ola de migrantes venezolanos a Colombia se presentó entre 1999 hasta el
2002. Fue motivada, principalmente, por el cambio de régimen político, materializado en el
ascenso de Hugo Chávez Frías a la presidencia venezolana. Tras este suceso se generó un
éxodo de rivales políticos e industriales, que vieron sus intereses amenazados por la nueva
corriente política. Luego, del 2005 al 2009, se presentaron despidos masivos en la empresa
estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), que ocasionó la llegada a Colombia de ingenieros
y antiguos empleados de PDVSA, los cuales hallaron empleos en empresas del sector,
favorecidos por la bonanza petrolera y los altos precios del crudo. La tercera ola de migrantes
se presentó del 2010 al 2014, y se caracterizó por la salida de profesionales y estudiantes
universitarios de diferentes disciplinas, bajo el deseo de proteger su capital de las cada vez
más represivas políticas del chavismo (Ramos y Gehring 2018, 10; Chavarro Miranda,
Albarracín y Osorio Isaza 2019).
La cuarta ola, la cual va a ser el centro de este artículo, se desarrolla desde el año
2015, durante el cual el presidente venezolano Nicolas Maduro cierra, de forma unilateral, la
frontera terrestre común entre ambos países. En agosto de ese año, se presenta la expulsión
arbitraria de cerca de 2000 ciudadanos colombianos residentes en Venezuela, tras acusarlos
de pertenecer a grupos paramilitares, lo cual incrementó la crisis bilateral (López Díaz 2019;
Edson Louidor 2018; Tribín et al. 2020). A partir de tal momento, se evidencia un aumento
exponencial en la recepción de individuos venezolanos en territorio colombiano. Para el año
2016, la cifra de venezolanos se incrementó en un 71% con respecto al 2015; se llega a los
53 747 individuos. En el 2017, esta cifra alcanzó los 403 702, lo cual significó un incremento
del 651%. Para el 2018, este porcentaje aumentó en 190 puntos porcentuales, con 1 174 743
venezolanos en ciudades colombianas. En el año 2019, se registraron 1 771 237 migrantes
del país caribeño. El año 2020 presentó un decrecimiento del 2,35%, sobre todo, debido a las
medidas restrictivas por la pandemia de COVID-19 (Ministerio de Relaciones Exteriores
2022).
La última información disponible, publicada por el Ministerio de Relaciones
Exteriores (2022) da cuenta de un total de 2 894 593 ciudadanos venezolanos en territorio
colombiano, de los cuales 311 729 se encuentran como irregulares a corte octubre del 2022.
Esta cifra representa un incremento en la percepción de la migración venezolana en un 57%
con respecto a los 1 842 390 registrados en el año 2021. Según esta información, se podría